AMOR
CLANDESTINO
ANTES…
Y así fue…como disfrutaron
de aquella mágica reconciliación, que los uniría a los dos tal vez no para
siempre, ya que existirían discusiones como en cualquier pareja habitual, pero
sí por mucho tiempo…ya que a pesar de cualquier discusión o tontería, su amor
era más fuerte que cualquier obstáculo que se les interpusiera, y siempre
terminarían así…amándose desgarradoramente con el alma.
CONTINUACIÓN…
Después de pasar aquella
velada romántica en Paris, y disfrutar de un buen chapuzón en la pileta. Entre
besos y abrazos se dirigieron a la habitación, donde se demostraron nuevamente
todo el amor que sentían el uno por el otro.
A la mañana siguiente
Carina se encontraba recostada en la cama durmiendo tranquilamente, mientras
percibe en sus labios una cálida presencia. Era Sebastián…quien la había
desvelado de sus sueños para recibirla con un rico y nutritivo desayuno en sus
manos, acompañado por un “Buenos días mi amor”. Ella abrió sus ojos lentamente
y se encontró frente a ella al hombre que había vuelto a conquistarla, al que
amaba con la vida.
Carina: Buenos días mi
amor (dijo reincorporándose en la cama y sonriendo)
Sebastián: Buenos días
vida, cómo amaneciste?
Carina: Bien…muy bien
(dijo sonriendo) después de la noche hermosa que pasamos no podría estar mejor
(estirándose)
Sebastián: Buenísimo, yo
también dormí demasiado bien, pero como gastamos tantas energía me decidí por
traerte este desayuno bien reconfortante así nos vamos a trabajar, te parece?
Carina: Me parece genial
(le da un beso)
Sebastián: Perfecto
(sonríe)
Carina: (prueba un poco de
la ensalada de fruta que él le había preparado) Mmm…está riquísima
(saboreándose)
Sebastián: Te gusta? La
hice yo con mis propias manos, si sigo así me recibo de chef eh
Carina: Ay negro no
exageres jajaja
Sebastián: Cómo que no?
soy un crack rubia, no me jodas (decía haciéndose el banana)
Carina: Jajajaja callate
imbécil, sabes que cocino mucho mejor que vos (agrandándose)
Sebastián: Jajaja vos
mejor que yo? Quién te dijo eso? (ríe)
Carina: Yo lo sé, no hace
falta que alguien me lo diga, pff…no entré a trabajar con Narda de pedo
(haciendo un gesto)
Sebastián: Jajajajaja
bueee que rubia engreída che! Jajaja
Carina: Jajaja te estoy
jodiendo, sé cocinar muy bien…no te lo voy a negar, pero tampoco para tanto
(ríe)
Sebastián: Jajaja mentira
mi amor, si sé que cocinas exquisito, no te lo puedo negar
Carina: Ah si? mm (dijo
acercándose y besándolo) me vas a acompañar a desayunar?
Sebastián: Por supuesto
(dijo sentándose a su lado)
Pasaron dos horas y Carina
y Sebastián debían irse a Pampa, pero pero no podían llegar juntos por motivos
obvios. Así que decidieron que primero saldría Sebastián, y así fue.
Carina: Bueno mi amor te
veo en un rato
Sebastián: Dale, te
espero…(la besa y se acerca a su oído para susurrarle…) te veo en mi camarín
(seguido de otro beso apasionado)
Carina: Bien (sonríe)
Sebastián luego de
despedirse de Carina se subió a su camioneta y se dirigió a Pampa.
Al llegar ya habían
llegado algunos compañeros de trabajo, se encargó de saludarlo uno a uno,
incluídos técnicos y demás.
Luego de terminar se
dirigió a su camarín, a prepararse y mientras esperaba a Carina.
Pasaron unos minutos y en
eso alguien golpea la puerta de su camarín. Sebastián pensando que era Carina
abre la puerta con una sonrisa en la cara, pero se encontró con Diego…diciéndole
que Ivana estaba en Pampa, y que había pedido urgentemente hablar con él.
Sebastián: Pero y qué le
dijiste?
Diego: Que si estabas
Sebastián, qué querías…que le mintiera?
Sebastián: Y no pero es
que seguro viene a romperme las pelotas, sabes perfectamente como es
Diego: Si lo sé, pero no
puedo decirle que no estás, ella conoce tus horarios y sabe que estás acá, no
tenes opción…vas a tener que hablar con ella si o sí
Sebastián: Y si…ya está,
decile que pase (malhumorado)
Diego: Está bien, suerte
con la loca (dijo palmeándole la espalda y sonriendo)
Diego va a buscar a Ivana
pero se sorprende que ya estaba detrás de él, se había adelantado.
Diego: Ah Ivana, justo te
iba a decir que dice Sebastián que pases, está en su camarín
Ivana: Bien (dice
seriamente y se dirige al camarín de Sebastián)
(Abre la puerta sin
preguntar)
Sebastián: No te enseñaron
a tocar a vos? (dijo irritado)
Ivana: No me vengas con
modales que no estoy de humor
Sebastián: Ahh no está de
humor la señora, por eso viene y entra sin tocar, que genialidad
Ivana: Haceme el favor de
callarte, qué hiciste anoche?
Sebastián: Anoche? De qué
hablas? (dijo a la defensiva)
Ivana: Sabes perfectamente
que te estoy preguntando, responde, qué hiciste anoche? (reiteró, tornándose
más nerviosa)
Sebastián: Por qué no me
dejas de romper las pelotas? No tengo que darte explicaciones de nada a vos
(dijo exaltándose)
Ivana: Mirá Sebastián no te
hagas el pelotudo, vos sabes muy bien el trato que tenemos…y que si lo rompes,
ya sabes quien va a pagar tus “deslices” (dijo haciendo las comillas
burlescamente)
Sebastián: Cortala con
eso, no empieces a amenazarme Ivana
Ivana: Vos te lo buscas, respondeme
la pregunta que te hice
Sebastián: No hice nada
anoche dios! Absolutamente nada, no sé qué carajo te pasa
Ivana: Ah no? estás
seguro?
Sebastián: Si, no me jodas
Ivana, anoche estaba en mi casa…con Sol y mi hermano (recordó la mentira que
Sol le había repetido que dijera)
Ivana: Aha… (sin terminar
de creerle por completo)
Sebastián: Si…como
escuchas, una cena entre hermanos, ahora me vas a prohibir verlos a ellos
también?
Ivana: (sonríe
maliciosamente) No, ellos no me estorban…hasta ahora (dijo riendo)
Sebastián: Que enferma que
sos (decía mirándola con rabia)
Ivana: Como le decis eso a
tu queridita esposa mi amor eh? Muy mal, pensar que a pesar de todo yo te sigo
queriendo (se iba acercando a él lentamente)
Sebastián: Uff…no sabes cuánto
se nota
Ivana: Pasa que vos me
haces enojar a veces, y eso me pone algo…intensa, pero yo te quiero (le
acaricia el rostro)
Sebastián: (trataba de
evitarla, realmente estaba enferma)
Ivana: Y además…tengo que
confesarte que te extraño…extraño tus besos, tus caricias (se acercaba cada vez
más) que me hagas el amor…(con su mano acariciaba el pecho de Sebastián,
rodeando los pliegues de su camisa)
Sebastián: Basta Ivana,
qué haces…(dijo tratando de zafar de ella pero no podía)
Ivana: No te acordas que
bien la pasábamos juntos? (le besó el cuello) las horas y horas que pasábamos en
nuestra habitación? (le mordía la oreja)
Sebastián: (trataba de
permanecer inmóvil, un movimiento en falso que hiciera y podía arruinarlo todo)
Carina ya había llegado a
Pampa, saludó a todos como siempre acostumbraba a hacerlo. Y luego se dirigió a
su camarín. Dejó sus cosas y miró la hora…supuso que Sebastián ya habría
llegado hacían unos 20 minutos. Así que como habían acordado fue a buscarlo a
su camarín, pero en el momento en que estaba por entrar escuchó voces que
provenían de ahí mismo. Y le extrañó…ya que parecía conocer perfectamente el
tono de esa voz.
Carina: Es Ivana…(dijo
sigilosamente, preguntándose qué hacía encerrada con Sebastián en su camarín, y
se quedó escuchando unos momentos para saber de qué hablaban).
Pronto escuchó que Ivana
lo seducía, y Sebastián trataba de evitarla pero no lo lograba. Carina ya no se
resistía, la ira comenzaba a invadirla por completo, solo imaginarse que Ivana
estuviera besando y provocando a su hombre se le revolvía el estómago.
Lo pensó y lo pensó varias
veces, contó hasta diez…pero nada funcionó, seguía oyendo esos susurros de
Ivana que la incitaban a matarla en ese mismo momento.
Se descontroló, no pudo
más, y tomó la decisión más apresurada e incorrecta que podría haber tomado en
su vida…
Carina: (abriendo la
puerta de un solo azote) Qué mierda pretendes con Sebastián? (con la mirada
desencajada…mientras Ivana se quedó mirándola desafiante, sin poder creer su
actitud, al igual que Sebastián…quien sorprendido se quedó inmóvil ante la
situación).
CONTINUARÁ…