¿Qué te parece Amor Clandestino?

sábado, 28 de diciembre de 2013

AMOR CLANDESTINO CAP 69 "Reconciliación a la francesa"

AMOR CLANDESTINO

ANTES…

Carina: No puedo ver?
Sebastián: No, hasta que yo te diga
Carina: Mmm…bueno (dijo sonriendo, mientras Sebastián le tapaba los ojos y le indicaba el camino) ya llegamos?
Sebastián: Falta poco...un poquito más…listo, llegamos
Carina: Quiero ver (ansiosa)
Sebastián: (saca las manos de sus ojos lentamente mientras observa la mirada asombrada de Carina) Bienvenida a Paris…mi amor (dijo sonriéndole con ternura).



CONTINUACIÓN…

Carina al abrir los ojos y encontrarse con semejante maravilla frente a ella simplemente no podía creerlo, era demasiado hermoso para ser cierto. Realmente Sebastián se había encargado de que todo quedara perfectamente alistado. Había estado en cada detalle para hacer de aquella velada de reconciliación, la más romántica de sus vidas.
Aún más para ella, su mujer, su amor…quería hacerle pasar una noche inolvidable, que los reconfortara amorosamente más que antes, y así pudieran tener una relación sana y esta vez sin traiciones, ni rencores, ni nada que pudiera arruinar tanto amor.
La reacción de Carina fue sonreír a más no poder, y que una pequeña lagrimilla brotara de su ojo izquierdo por tanta felicidad.

Sebastián: Y…? te gustó? (sonriendo)
Carina: (casi sin palabras) No…no sé qué decir (emocionada) me encanta, me fascina! (dijo feliz)
Sebastián: (ríe) Me alegro tanto! (dijo feliz) todo esto es para vos amor, para que disfrutemos juntos de esta noche tan especial (sonríe)
Carina: Gracias…gracias mi amor te amo (se acerca y lo besa) no puedo creer que hayas preparado todo esto para mi
Sebastián: Creelo…es todo para vos, (sonríe) lo hice porque te amo, y porque te lo mereces
Carina: Gracias otra vez (sonríe emocionada)
Sebastián: De nada mi amor, ahora basta de lágrimas y disfrutemos de la cena que se va a enfriar
Carina: Dale (sonríe)
Sebastián: (la toma de la mano y la encamina hacia la escalera del balcón donde se encontraba la mesa en la que cenarían.
En medio de un gigante parque fuera de la casa, rodeado de mucho verde y acompañado por una lujosa pileta iluminada por unos 10 faros de neón azul a su alrededor).

La mesa tenía un blanco mantel de seda, y los cubiertos eran de plata. Alrededor de la mesa estaba repleto de pétalos de rosas rojas, junto con un ramo que había en el centro.
Los pétalos formaban un camino desde el living, luego la escalera, y así hasta la mesa que se encontraba en el amplio balcón con vista a un cielo raso y enorme, repleto de estrellas conformando galaxias, y la luna…más grande y más brillante que nunca. Era como si todo hubiera sido perfectamente planeado para ellos dos, como si hasta la naturaleza se hubiera puesto de acuerdo para hacer que esa noche fuera la más especial para ambos…y que no la olvidaran nunca.
En el balcón todo estaba ambientado a lo francés. Los adornos, el aroma, la vista, y hasta la comida…Realmente parecía que verdaderamente se encontraban en París.

Carina: No me canso de mirar todo (asombrada mirando a su alrededor) estuviste en cada detalle…todo…(decía sonriendo)
Sebastián: Me pone feliz que te haya gustado tanto, realmente era lo que quería…
Carina: Esta vez te esmeraste por demás, me sorprendiste eh
Sebastián: Soy bueno sorprendiendo (le hace una guiñada algo vanidoso)
Carina: Ay ya se te subió el ego negro, no podes con tu genio (dijo riendo)
Sebastián: Jajaja es tu culpa rubia
Carina: Mi culpa? Yo no tengo la culpa de que seas un egocéntrico del carajo, pero así te quiero (se acerca y lo besa con pasión)
Sebastián: Y yo también te quiero así, histérica y loca como sos (dijo riendo y luego continuó el beso que ella había comenzado) Bueno comamos que se enfría (dijo frenando el beso)
Carina: Mm a ver, qué preparaste?
Sebastián: (Destapa una fuente típica de restaurante lujoso y le sirve) Probá
Carina: A ver…(dijo comiendo un poco) Está riquísimo amor, también hiciste esto? (dijo sorprendida)
Sebastián: Si…yo y el restaurante francés de San Isidro (ríe)
Carina: (ríe) Me parecía que era demasiado bueno para ser cierto (continúa riendo)
Sebastián: Que exagerada che, está bien, no sabía cocinar comida francesa por eso pedí una ayudita, pero lo demás es toda obra mía che (hace puchero)
Carina: Jajaja lo sé amor, te estaba jodiendo, me encanta todo lo que hiciste por mí, sos un dulce (dándole un piquito)
Sebastián: Mmm está bien, no tenes nada que agradecerme, todo por vos (la besa)
Carina: (Le sonríe) Vamos a ver qué tal está esto
Sebastián: Y faltaba el vinito…(le sirve media copa)

Mientras Carina y Sebastián estaban disfrutando más que nunca de aquella hermosa velada, Sol se encontraba fuera de la casa, haciendo hasta lo imposible para que Ivana no los descubriera.

Sol: Ivana…no es de forra pero te dije que es una cena entre hermanos y padres nada más, queríamos un poco de intimidad, por eso no te invitamos, ni a vos ni a la esposa de Diego, ni a Segundo, ni a nadie.
Ivana: Eso lo entiendo, pero por qué Sebastián no me avisó que tenían una “cena” (dijo haciendo las comillas)
Sol: Y…no sé, que se yo, las cosas entre él y vos no están muy bien que digamos, quizás por eso no te dijo, pero tampoco es la gran cosa como para que te pongas así.
Ivana: Bueno pero de todas formas, siento que me estás echando de acá, y eso…es demasiado raro (dijo observando el lugar)
Sol: Yo echándote? Nada que ver Ivana, solo te estoy diciendo que es algo íntimo, nada más, pero te empecinas en quedarte a toda costa. Mirá…yo sé que las cosas con Sebastián no van muy bien, y sé que quizás quieras controlarlo, o vigilarlo, o lo que sea, pero eso no está bien…y menos delante de su familia. Si seguís asfixiándolo y hostigándolo como lo estás haciendo vas a lograr que a Sebastián le chupe un huevo todo y te largue a la mierda (siendo sincera).
Ivana: Eso no va a ser así (dijo enojada)
Sol: Es lo que vas a conseguir con esas actitudes que tenes, tranquilizate un poco, andá a tu casa y buscá a los nenes, que seguramente los dejaste en la casa de alguna amiga
Ivana: Vos no me vas a decir lo que yo tengo que hacer me escuchaste? Creo que por ser hermana de mi esposo te estás tomando muchas atribuciones que no te corresponden (dijo ya furiosa)
Sol: No entendés nada Ivana, estoy tratando de que entiendas que todo está bien, que no hace falta que andes atrás de Sebastián como si fuera un nene porque no es así, dejalo ser
Ivana: Mirá…yo me voy a ir, pero que te quede claro que esto no va a quedar así, vos ya te metiste en mi camino como una enemiga más…y de eso no hay vuelta atrás
Sol: (sorprendida) Yo no soy tu enemiga Ivana, qué decís?
Ivana: Hasta luego…(dijo enojada, subiendo a su auto nuevamente, y volviendo a su casa)
Sol: Dios, esta mina cada vez más loca (dijo suspirando de alivio)

Una vez que Ivana se va, Sol saca su celular y le envía un mensaje de texto a Sebastián, avisándole lo que había ocurrido pero que ya no había de qué preocuparse.

Carina: Pasa algo? (dijo observando a Sebastián leer con atención el mensaje de Sol)
Sebastián: No no, nada importante amor (sonríe y apaga el celular más tranquilo después de la ayuda de Sol) Bueno ahora sí, disfrutemos de esta cena en paz y armonía (dijo mientras sonreía)
Carina: Por supuesto (sonríe contenta)

Así se quedaron cenando muy placenteramente los dos, disfrutando de una magnífica noche que los acompañaba, junto a aquella luz de luna pura y natural que hacía de la velada única y romántica.

Pasó alrededor de una hora e Ivana estaba en su casa, dando vueltas y vueltas cual gato enjaulado. Sin saber qué hacer o pensar.
Realmente entre la llamada de Laura su confidente, y los dichos de Sol su cuñada no sabía que pensar, verdaderamente Sol estaba mintiéndole? O quizás Laura se había equivocado al oír aquella conversación?...Tal vez había escuchado bien pero Sebastián había decidido posponer la cena con Carina para juntarse con su familia, ya que Sol parecía muy sincera en aquel momento. Su cabeza era un enriedo. Pero optó por quedarse esperando en su casa y no hacer nada sin estar segura, para dejar que las horas depararan lo que tuviera que hacer o no hacer después.

Carina y Sebastián ya habían terminado de cenar, y también de comer el postre. Se encontraban muy placenteros charlando sobre ellos y todos los planes que tenían juntos.

Carina: Riquísimo el postre, cómo es que se llamaba?
Sebastián: Creme Brule, típico postre francés (sonríe)
Carina: Ahhh, pero como sabes de gastronomía francesa por favor, que cultura mi amor (dijo riendo)
Sebastián: Jajaja no te me burles rubia, algo sé (le hace una guiñada)
Carina: Pero si no me burlo (ríe) al contrario, me gusta…me gusta que sepas tanto (se muerde el labio inferior)
Sebastián: Aya, no te muerdas el labio así por dios (dijo poniéndose loquito)
Carina: (Sentada desde su lugar, se acerca un poco hacia él) Por qué no? (provocándolo)
Sebastián: Porque sabes cómo me pongo cuando haces eso (mirándola fijo)
Carina: Qué cosa? (haciéndose la desentendida y volviéndose a morder el labio)
Sebastián: Eso…eso…(dijo anonadado)
Carina: Esto? (haciéndose la boba) ay pero yo pensé que te gustaba (dijo inocentemente)
Sebastián: Claro que me gusta, me encanta, pero me vas a hacer que te tire arriba de la mesa ya mismo y arruine el resto de la sorpresa entendés, porque no me aguanto, sos hermosa (dijo bastante calentito)
Carina: (ríe) Apa…como estamos eh, vos sos hermoso (susurrándoselo en los labios)
Sebastián: Como sos eh...te gusta provocarme rubia (meciendo la cabeza hacia los lados como diciendo “sos tremenda”)
Carina: Jajaja bueno basta, así que todavía queda algo de la sorpresa?
Sebastián: Si…queda algo más, que te lo voy a mostrar ahora
Carina: Mmm…ahora? no puede ser enseguida? Mirá que recién acabamos de comer y no hicimos la digestión, dicen que después de comer hace mal (haciendo un gesto ingenuo)
Sebastián: Jajajajaja pero que mal pensada de mierda que sos eh, dios mío! (dijo riendo)
Carina: Yo mal pensada? Vos sos el que insinúa obscenidades (dijo riendo, haciéndose la indiferente)
Sebastián: Yo? Jajaja me refería a otra cosa Carinita de mi corazón, es otra sorpresa, eso…más tarde te lo muestro si queres, ahora no seas golosa (dijo bromeando)
Carina: Jajajaja callate estúpido (dijo sonrojada)
Sebastián: (ríe) Bueno hablando enserio, necesito que me acompañes abajo hasta el living, y yo mientras voy a estar en el parque esperándote, si?
Carina: Ehh…si, pero qué tengo que hacer en el living? No entiendo (curiosa)
Sebastián: Cuando estemos allá te explico (le hace una guiñada) vamos? (extendiéndole la mano)
Carina: Vamos (sonríe)

Carina y Sebastián bajan del balcón, y Sebastián la acompaña hasta el living, donde arriba de uno de los sillones había una caja de color fucsia.

Carina: Y eso? (dijo observando la caja)
Sebastián: Abrila (sonríe)
Carina: A ver…(Dijo entusiasmada, como cualquier persona que está a punto de abrir un regalo. Al abrirla se encuentra con un hermoso traje de baño de color azul marino, con una voluptuosa parte de arriba para sus grandes pechos.) Y esto? (dijo sonriendo)
Sebastián: Es para que lo uses ahora, lo vas a estrenar conmigo (pícaro)
Carina: Ahora? (ríe) estás loco (mirando el traje)
Sebastián: Por supuesto que si, dale, andá y cambiate en el baño que yo te espero en el parque al lado de la pileta
Carina: Pero…(interrumpe)
Sebastián: Sin peros, dale amor…te va a quedar muy sexy (besándola y retirándose al parque)
Carina: Dios mío, este hombre está cada vez más loco (dijo sonriendo y mordiéndose el labio inferior)

Y así Carina se dirigió al baño y se predispuso a sacarse la ropa y ponerse aquel traje de baño que Sebastián tanto ansiaba que usara.
Una vez lista se soltó el cabello y lo alocó un poco, para verse más casual. Luego se acercó al espejo y se observó unos momentos…

Carina: Bueno…para ser hombre y no tener idea de cómo vestir a una mujer tengo que decir que se lució, me queda perfecto, y el color me encanta (dijo sonriéndose así misma)

Después de eso salió del baño con una bata en mano que allí encontró, y se dirigió al parque trasero donde Sebastián la esperaba.
Caminó unos pasos más y allí lo vió, ya listo con su pantalón de baño puesto, recostado en una de las reposeras que habían. Cuando la vió su primera reacción fue embobarse por completo, en su vida había visto mujer más bella que esa. Con ese traje de baño azul que había elegido a la perfección, y que le asentaba tan bien con su color de piel blanca aterciopelada, y ese rubio oro en el cabello. Simplemente parecía una sirena recién salida del mar.

Sebastián: Mi amor, estás…divina (dijo mirándola de arriba abajo)
Carina: Te gusta? (sonriendo)
Sebastián: Me fascina, estás demasiado sexy, que no te vaya a ver alguien más porque así como estás te violan, así sea en la playa (dijo celoso)
Carina: (ríe) Pero que exagerado che jajaja
Sebastián: Es la verdad, sos bellísima
Carina: Bueno gracias, igual es tu mérito, vos elegiste el traje
Sebastián: Si pero quien lo usa sos vos, vos lo haces hermoso
Carina: Gracias…(sonríe tierna)
Sebastián: De nada (sonríe) bueno venis? (dijo extendiéndole la mano)
Carina: Mmm si (dijo acercándose)
Sebastián: Dejá la bata ahí, ahora no la vas a necesitar
Carina: (deja la bata sobre la reposera y se queda mirando a Sebastián a la expectativa)
Sebastián: Vos primero y después yo, yo primero y después vos, te tiro yo o…nos tiramos juntos? vos elegís (pícaro)
Carina: Mm…no sé, primero tengo que ver si el agua está lo suficientemente a temperatura ambiente como para tirarme, sino me cago de frío y no quiero, después me enfermo y quién compra los remedios? Carina (mientras se encontraba de espaldas palpando la temperatura del agua y continuaba excusándose para no meterse de una, Sebastián se acerca sigilosamente y la toma por detrás, haciendo exaltarla un poco)
Carina: Qué haces? (sintiendo los firmes brazos de Sebastián sobre su cintura)
Sebastián: Sos demasiado lerda para elegir amor, pero no te preocupes…ya decidí por vos (dijo sonriendo pícaramente, luego de apretarla contra él y lanzarse a la pileta así como estaban, abrazados, juntos como él le había propuesto, mientras se escuchaba de fondo un grito de Carina de pura adrenalina).

Una vez en la pileta, los dos abajo del agua se reencuentran cuerpo con cuerpo, mirada a mirada. Y al verse tan cerca y tan complementados el uno con el otro, no pudieron evitar el deseo de besarse…así como estaban, aguantando la respiración bajo el agua, y dándose el beso más romántico que podrían haberse dado.
Disfrutaban de sus húmedos labios mutuamente.

Después de aquel acto de amor, se reincorporaron en la superficie y se quedaron mirándose unos segundos, que para ellos fue una completa eternidad.

Sebastián: Te amo mi amor…y te prometo que esta vez voy a luchar contra todo y contra todos por nuestro amor, no voy a dejar que Ivana ni nadie se meta en el medio y arruine esto tan hermoso que tenemos, porque nos amamos…y te juro que esto junto con mis hijos son lo más importante que tengo en la vida…
Carina: (emocionada por aquellas palabras) Gracias amor…gracias por esto y por todo, y también te prometo que voy a luchar por vos, por mi, por nuestros hijos, y por este amor que nos da vida…que nos alimenta…que nos hace fuerte a los dos, porque te amo…y sos lo único que quiero para mí en mi vida (sonríe llorando) te amo…
Sebastián: Yo más (sonríe feliz, mientras se funden en un beso apasionado y repleto de amor, los dos abrazados y completamente acurrucados el uno con el otro, demostrando lo mucho que se habían necesitado todo ese tiempo…y lo mucho que se seguían amando, tal como el primer día en que se miraron a los ojos.

Y así fue…como disfrutaron de aquella mágica reconciliación, que los uniría a los dos tal vez no para siempre, ya que existirían discusiones como en cualquier pareja habitual, pero sí por mucho tiempo…ya que a pesar de cualquier discusión o tontería, su amor era más fuerte que cualquier obstáculo que se les interpusiera, y siempre terminarían así…amándose desgarradoramente con el alma.





CONTINUARÁ…

sábado, 14 de diciembre de 2013

AMOR CLANDESTINO CAP 68 "De vuelta al amor"

AMOR CLANDESTINO

ANTES…

Carina: Dios! (dijo completamente irritada por Sebastián, se levantó del sillón para dirigirse al baño cuando de repente Sebastián le coloca el pié haciendo que caiga al suelo, mientras él se hace el que también tropieza y cae sobre ella)
Carina: Pero qué hacés pelotudo! (dijo enojada tratando de sacarlo de encima)
Sebastián: Sos una hija de puta, pero así de conchuda y todo…te amo igual (dijo mirándola a los ojos, mientras comenzó a besarla con pasión, saciando esa sed de amor que venían acumulando los dos desde hacía tiempo, y volviéndose a sentir cuerpo con cuerpo y labios con labios…tal y como la primera vez.)



CONTINUACIÓN…

Fueron aproximadamente 2 minutos los que pasaron desde el comienzo de aquel beso furtivo que lo cambiaría todo como si fuera el mismo Dios, como si fuera el mismo destino que se había entrometido en esa habitación para de una vez sacar lo mejor de ellos sin que los rencores, las traiciones, las discusiones, ni el mismo odio pudiera hacer algo contra el amor que ellos sentían el uno por el otro a pesar de todo.

Carina seguía recostada en el piso, cuando al pasar 3 segundos más trató de parar con aquello que tan feliz la hacía, pero que a la vez la atemorizaba por completo. Pero Sebastián no lo permitió de ninguna manera, la tomó de ambos brazos y con la fuerza bruta pero delicada de los suyos la aprisionó entre el suelo y su cuerpo, sin siquiera darle la oportunidad a renegar por ello.
Y así definitivamente Carina ya no pudo resistirse a ese hombre que tan loca la volvía, a ese hombre que amaba con el alma, a ese hombre que le había devuelto la vida en un suspiro…simplemente quería seguir sintiéndose así, encarcelada entre sus brazos.

Los minutos pasaron y ellos continuaban besándose, con la misma pasión y la misma entrega que desde el comienzo. Hasta que tuvieron que recobrar el aliento…y fueron separando sus labios de a poco, finalizando aquel prolongado beso con pequeños piquitos.
Luego de eso, Sebastián aún sobre Carina, se quedaron mirando unos segundos…compenetrándose en espíritu con la mirada, hasta ser Carina quien rompiera el silencio y la conexión.

Carina: Qué voy a hacer con vos…(dijo todavía mirándolo)
Sebastián: Amarme? (dijo tiernamente)
Carina: Ojalá fuera así de fácil Sebastián (dijo tornándose preocupada y girando la mirada hacia el costado)
Sebastián: Es así de fácil y más todavía, para que me ames como siempre no se necesita nada más que nosotros, y bueno…unos cuantos besos también para convencerte (dijo dándole piquitos en el cuello y en todo su entorno, haciéndola sonreír)
Carina: Por qué me haces esto? (dijo volviendo la mirada hacia él)
Sebastián: Qué cosa? (observándola)
Carina: Esto…de mirarme, y de besarme así como lo haces…y hacerme olvidar de todo lo malo, de todo lo que pasó (con la mirada cristalina)
Sebastián: Porque me amas, y porque te amo, y hasta acá llegó mi orgullo Carina…
Carina: Qué querés decir con eso? (dijo sin entender)
Sebastián: Que a partir de ahora…no pienso dejarte ir, y mucho menos dejar que te escapes de mi, a partir de ahora…vas a estar tatuada en mí (tomándole una mano y colocándola en su pecho)
Carina: (lo miró dulcemente y no pudo evitar sonreír de la alegría ante aquella confesión)

Pero el momento se oscureció…cuando Carina recordó el daño que le había hecho a Sebastián besándose con Segundo, que no había sido algo planeado pero que de igual modo sentía que lo había traicionado, por más que él estuviera con Ivana. Y Sebastián lo notó de inmediato.

Sebastián: Hey…qué pasa?
Carina: (mirándolo mientras se desvanecía una lágrima sobre su mejilla)
Sebastián: Estás llorando, mi amor…qué pasó? (sin entender)
Carina: Que no te merezco Sebastián, eso pasa, que soy una mala persona, soy una mierda (comenzando a llorar)
Sebastián: No digas eso me escuchás? No lo vuelvas a decir nunca más, vos sos una hermosa persona mi amor, y sé por qué lo decís, pero…ya está, ya fue, lo que pasó con Segundo es parte del pasado, ahora quiero que reescribamos nuestro futuro juntos amor…que volvamos a soñar todos los planes que teníamos como antes, quiero amarte, quiero que me ames…(limpiándole los restos de lágrimas que quedaban en sus mejillas con su dedo pulgar y recostándose a su lado, mientras la abrazaba y la rodeaba fuertemente con sus robustos brazos).
Allí Carina se sentía ella misma, se sentía real, pura, mujer…era allí mismo donde siempre querría estar…entre sus brazos.

Carina: Te amo…te amo con lo que soy Sebastián, y te prometo que esta vez no voy a arruinarlo (dijo mirándolo a los ojos)
Sebastián: Yo también te amo mi amor, y también te prometo que esta vez no voy a arruinarlo (sonriéndole…mientras sellaba aquel mágico pacto de amor con un dulce beso en los labios).

Las horas pasaron, y con ellas la madrugada llegó. Después de una larga noche llena de amor y confesiones.
Sol quien había sido la primera en llegar al estudio, ya que sabía perfectamente que había dejado a Carina y a Sebastián desde la noche anterior, así tenía que ir de inmediato a ver como había resultado todo su plan de Celestina empedernida.
Fue hasta el camarín de Carina sin que los pocos técnicos que habían llegado la vieran, y comenzó a buscar la llave de la puerta en su bolso, pero antes decidió golpear…por las dudas.

Sol: (golpea) Y…hablaron como les pedí? (sin recibir respuesta del otro lado) Cari…Sebas…(llamándolos) Carajo (buscando las llaves en su cartera), no vaya a ser que estos dos se hayan matado ahí adentro (dijo abriendo rápidamente la puerta, donde se encontró con una imagen digna de fotografiar…los dos recostados sobre el sillón bien abrazaditos) Ai pero si son un amor! (dijo sin querer levantando el tono de voz, despertando a Carina, quien se asustó al verla parada allí observándolos embobada como si fuera Katie de Actividad Paranormal (?).

Carina: Ai Sol, qué haces ahí parada con esa cara de boluda? (dijo refregándose los ojos)
Sol: Los observo…son hermosos tarada! (gritó, haciendo despertar a Sebastián)
Sebastián: Che…qué pasó? (con voz de dormido, no entendiendo nada)
Sol: Al parecer hicieron mucho más que hablar anoche eh (haciéndoles una guiñada)
Carina: Nada que ver Sol, no hicimos nada, así que dejá de fantasear querés? (asesinándola con la mirada)
Sol: (ríe) Bueno bueno está bien, “supongamos” (haciendo las comillas) que no hicieron nada, hablaron? Llegaron a un acuerdo? Porque miren que si no es así los vuelvo a encerrar y les abro la semana que viene eh…aunque viéndolos así, es obvio que hablaron (sonriendo)
Sebastián: Si, hablamos Sol, hablamos
Carina: Y llegamos a un acuerdo, contenta? (dijo mirándola)
Sol: Contentísima! (riendo) y ahora qué piensan hacer?
Carina: Ahora pienso ir volando a mi casa y pegarme una ducha, porque por TU culpa no tuve tiempo de hacer nada, desde ayer que estoy con esta ropa nena (dijo levantándose del sillón)
Sol: Bueno pero valió la pena, o no? (sonriendo)
Sebastián: Si, pero cuando querés te zarpas boluda eh…
Sol: Ai fue un jueguito nada más, que me salió perfecto (haciendo un gesto)
Carina: (meciendo la cabeza hacia los lados) bueno me voy…necesito bañarme porque no doy más (dijo haciendo un gesto, y tomando sus cosas para irse)
Sebastián: Esperá Cari (se acerca a ella), nos podemos ver esta noche? (como un nene)
Carina: Si…por supuesto (dijo sonriendo como una adolescente enamorada)
Sebastián: Bueno, más tarde te aviso en donde nos vemos y a que hora (sonríe feliz)
Carina: Dale, chau…nos vemos en un rato (sonríe)
Sebastián: Chau…(se acerca suavemente y le deposita un dulce y delicado beso en los labios, haciendo que Carina quedara en las nubes)
Sol: Me empalagaron con tanta dulzura che (dijo riendo y mirándolos)
Carina: (ríe) Chau Sol (yéndose)

Más tarde en Pampa, ya eran eso de las 15:00 de la tarde. Habían avanzado con las escenas del día así que todos se encontraban almorzando en su hora de receso.
Carina salía de su camarín dirigiéndose al bar para almorzar algo, se sentó en una de las mesas y de pronto aparece Sebastián para hacerle compañía.

Sebastián: Hey rubia…solita? (dice haciéndose el canchero)
Carina: Claro que no, estoy acá sentada…disfrutando de la compañía de Casper, no lo ves? (dijo riendo)
Sebastián: Jajaja sos tontita eh (dijo sentándose frente a ella) salieron bien las escenas, bastante bien
Carina: Mm si, una buena forma de empezar la reconciliación…no? (dijo mirándolo pícara)
Sebastián: (la mira mordiéndose el labio, y se acerca a ella para decirle prácticamente sobre sus labios) ni te imaginás la reconciliación que estoy preparando para esta noche…
Carina: Mmm…qué me vas a preparar para cenar? (dijo seductora)
Sebastián: Sorpresa, pero te va a encantar
Carina: Ah si? (mordiéndose el labio)
Sebastián: Dios…no te muerdas el labio así por favor, no hagas la de Anastasia Steele porque te agarro acá y te mato rubia (dijo poniéndose “loquito”)
Carina: Por qué no? no le gusta mi señor Grey? (dijo aprovechándose de la situación)
Sebastián: Sos tremenda (dijo susurrándole en los labios)
Carina: (ríe) Bueno basta, controlémonos, tengo hambre…
Sebastián: Ahí voy yo y pido para comer, dale?
Carina: Dale, a mi traeme…(interrumpe)
Sebastián: Si, ya sé, tarta jamón y queso con una ensalada verde y una botella de agua mineral (dijo sonriendo)
Carina: Apa…como me conoces eh
Sebastián: Como la palma de mi mano, es como no conocerte en pelotas
Carina: Que desubicado que sos Estevanez (dijo retándolo)
Sebastián: Jajaja es la verdad, que rincón de tu cuerpo no conoceré…ninguno!
Carina: Bueno callate! (sonrojada)
Sebastián: Te dio vergüencita? Jajaja
Carina: Basta (sonriendo) andá a buscar el almuerzo
Sebastián: Voy, voy (dijo levantándose y yendo a buscar para comer).

Horas más tarde, Sebastián le había pedido de favor a un amigo que le prepara algunas cosas en su casa de Nordelta para el encuentro con Carina, hasta que él saliera y terminara de preparar todo. Así que así fue.
Llegó la hora de salida y Sebastián se encontró con Carina en pasillo, donde se encargó de avisarle en dónde y a qué hora se reunirían, en una noche solo para los dos.

Sebastián: (la toma por detrás)
Carina: Ai nene me asustaste! (dijo dándose vuelta)
Sebastián: Yo te asusto? Te quería sorprender mi amor (dice robándole un beso)
Carina: Acá no Sebastián (lo reta, mirando hacia todos lados)
Sebastián: Bueno perdón señorita, no lo hago más (ríe) te venía a avisar a dónde nos encontramos esta noche
Carina: Aha, y dónde es?
Sebastián: En mi casa de Nordelta, a las 22:00
Carina: Perfecto, ahí voy a estar (sonríe mordiéndose el labio)
Sebastián: Otra vez con el labio no Carina (no se resistía)
Carina: (lo mira pícara)
Sebastián: (le roba otra beso)
Carina: Hey! (lo regaña)
Sebastián: Te dije que no lo hicieras (vengándose)
Carina: Tonto (dice sonriendo)
Sebastián: Bueno amor me voy yendo, que tengo algunas cosas que terminar de preparar
Carina: Bueno, te veo allá entonces
Sebastián: Más te vale, te voy a estar esperando
Carina: (sonríe)
Sebastián: Chau…mi amor…(dice robándole otro beso antes de que lo retara otra vez)
Carina: (se quedó sonriendo, amando a aquel hombre con alma de niño que la hacía completamente feliz).

Carina sacó sus cosas del camarín, y se dirigió a la salida…sin saber que “alguien” había estado oyendo toda la conversación en medio del pasillo con Sebastián. La misma persona que haría que todo esto llegara a oídos de Ivana.

En casa de Sebastián…
(Suena el teléfono)

Ivana: (atiende) Hola?
Laura: Hola Ivana, soy yo, Laura
Ivana: Ahh Laura, cómo andas?
Laura: Bien bien, mirá…llamaba porque tengo que contarte algo urgente
Ivana: Algo urgente? Decime (dijo súper intrigada)
Laura: (le cuenta todo lo que había escuchado en los pasillos sobre Carina y Sebastián, y su cara cambió por completo)
Ivana: Vos estás segura de lo que estás diciendo?
Laura: Muy segura, yo escuché bien Ivana
Ivana: Está bien…te llamo después, esto no va a quedar así (dijo furiosa cortando la llamada)

Se hizo de noche, y la hora de la reconciliación tan romántica había llegado. Sebastián ya tenía todo listo y perfectamente preparado para cuando llegara Carina, así que en fin…en el castillo solo faltaba la hermosa princesa.

Carina ya se había duchado, pero no sabía qué ropa ponerse, ya que Sebastián no le había advertido de antemano si era una cena muy formal o sería algo sencillo. Así que decidió preguntarle por whatsapp. Quien le dijo que fuera vestida sencilla…no hacía falta formalidad, al menos por el momento. Así que eso hizo Carina.

Luego de una hora ya eran las 21:00, y como Carina era súper puntual sacó su Honda Fit y partió rumbo a Nordelta, ya que no quería llegar tarde.
Cuando llegó bajó de su auto, le puso la alarma y se dirigió hasta la puerta de la casa de Sebastián. Al llegar notó que la puerta se encontraba entreabierta así que decidió pasar directamente. Cuando entró llamó a Sebastián pero este no respondía, hasta que llegó al living y vio una nota en la mesa ratonera que decía…”Hola amor…sé que esto es raro pero estoy seguro de que te va a encantar, así que necesito que subas las escaleras hasta la segunda habitación, y veas lo que hay sobre la cama”. Carina extrañada por la nota hizo lo que en ella decía. Subió las escaleras, entró a la segunda habitación, y al girar la vista hacia la cama se encontró con un hermoso vestido estilo Marilyn Monroe, excepto que este era color rojo furia.
Quedó embobada al ver ese vestido allí, con unos zapatos de plataforma también color rojo, y un despampanante collar de diamantes.
También había una nota, la cual leyó a continuación…”Esto forma parte de la gran sorpresa que tengo para vos, quiero verte con ese vestido...”
Carina sonrió con ternura al leer la nota, y de inmediato comenzó a sacarse la ropa para ponerse tan bello vestido.

Ivana como siempre estaba al tanto de todo, y obviamente no permitiría que Carina y Sebastián se salieran con la suya. Así que se subió a su auto rumbo a Nordelta, para arruinarles la fiesta.
Sol quien estaba completamente enterada de la sorpresa que Sebastián tenía para Carina, y quien también había ayudado, justo pasaba por la zona…y vio a Ivana salir muy rápidamente con su auto. Como le pareció sospechosa su actitud decidió seguirla, solo por instinto.

En Nordelta…

Carina ya estaba envuelta en ese vestido que Sebastián tanto ansiaba que usara, junto con los zapatos y el hermoso collar de piedras, a lo que agregó un elegante recogido de pelo para terminar el conjunto.
Al bajar las escaleras se encontró con otra nota que decía…”Supongo que ya estás lista, así que basta de notas. Acá empieza esta hermosa sorpresa que te preparé con tanto amor, acá comienza nuestro viaje juntos…nuestro viaje rumbo a Paris…” finalizaba la nota, mientras Carina no entendía nada, solo alzó la vista luego de leer la nota…y se encontró con Sebastián parado frente a ella, con un traje negro tallado al cuerpo, zapatos deslumbrantes color negro de punta fina, y un moño que finalizaba el conjunto. Realmente estaba más hermoso que nunca…

Sebastián: (se acerca a ella lentamente con una sonrisa en el rostro, y le dice) Estás hermosa…
Carina: Vos también (sonríe)
Sebastián: (sonríe) Ahora tenes que acompañarme, pero con los ojos cerrados
Carina: No puedo ver?
Sebastián: No, hasta que yo te diga
Carina: Mmm…bueno (dijo sonriendo, mientras Sebastián le tapaba los ojos y le indicaba el camino) ya llegamos?
Sebastián: Falta poco...un poquito más…listo, llegamos
Carina: Quiero ver (ansiosa)
Sebastián: (saca las manos de sus ojos lentamente mientras observa la mirada asombrada de Carina) Bienvenida a Paris…mi amor (dijo sonriéndole con ternura).





CONTINUARÁ…

lunes, 28 de octubre de 2013

AMOR CLANDESTINO CAP 67 "Donde hubo fuego, cenizas quedan"

AMOR CLANDESTINO

ANTES…

Abrió la puerta lentamente sin hacer ninguna clase de ruido, y al entrar escuchó mucho silencio, así que caminó unos pasos hasta llegar al borde del living…donde se encontró con lo que esperaba, o con lo que temía encontrarse…
Mientras una lágrima recorría lentamente su mejilla.


CONTINUACIÓN…

Sebastián no pudo soportar ver aquella escena entre Carina y Segundo, que realmente lo estaba destrozando por dentro. Se secó rápidamente esa lágrima que invadía su rostro y se dirigió a la salida. Cerrando la puerta evitando hacer alguna especie de ruido.
Tomó su camioneta y se fue.

Carina mientras lo besaba sintió como la culpa comenzaba a invadirla lentamente, así se separó de inmediato.

Segundo: Qué pasa? (preguntó confundido)
Carina: No, eh…(se aleja) esto no está bien, no…(se queda en silencio)
Segundo: Pero…por qué, pasó algo?
Carina: Simplemente no puedo hacerme esto (dijo mirándolo con los ojos vidriosos)
Segundo: Está bien…te entiendo
Carina: Perdoname, por favor, yo…estoy haciendo cualquier cosa, yo no soy así, no sé qué me pasa (sintiéndose culpable)
Segundo: No te preocupes, está todo bien, vos tenés a Sebastián en la cabeza y la verdad…no es justo para ninguno de los dos que hagamos esto
Carina: Exactamente eso, yo…(suspira) creo que va a ser mejor que te vayas (amablemente)
Segundo: Si si, este…(se levanta del sillón y toma su saco) nos vemos Cari, y…hagamos de cuenta que no pasó nada cierto? Sigamos siendo amigos (sonríe)
Carina: Por supuesto, amigos…(sonríe)
Segundo: Bueno…me voy, nos vemos mañana en Pampa
Carina: Dale, chau
Segundo: Chau (le da un beso en la mejilla y se va)

Carina se preparó un té y se lo llevó a su habitación. Se lavó los dientes, se colocó el pijamas, y se metió en su cama para tomarse el té y luego tratar de conciliar el sueño.
Pero no pudo, ya que al instante en que empezaba a cerrar sus ojos para poder dormir, comenzaron a llegar recuerdos…dolorosos y absurdos que no quería recordar, pero lamentablemente no pudo evitarlo.

Así estuvo toda la noche, culpándose así misma por lo que había pasado, y que había permitido que pasara con Segundo. Ya que nunca habría querido traicionar de esa forma a Sebastián, y mucho menos con Segundo. Pero también pensaba en que él seguramente seguía acostándose con Ivana y eso la enojaba aún más. El solo hecho de imaginárselos juntos la mataba por dentro.
Después de tanto remordimiento al fin pudo quedarse dormida a eso de las 5 de la mañana.

Al día siguiente Sebastián estaba levantándose para ir a Pampa.
Sus ojos estaban algo hinchados ya que había permanecido llorando durante toda la noche, recordando una y otra vez esa escena entre Carina y Segundo que no se borraba de su memoria ni por un momento.
Realmente el haberlos visto juntos, besándose como si fueran algo más que amigos, como si Carina de un día para el otro se hubiera olvidado de él completamente y habría decidido empezar una relación con Segundo, lo hacía trizas. Simplemente no quería recordarlo, pero su mente en ciertos momentos lo traicionaba.
Se predispuso para desayunar con Ivana, quien también se había levantado para llevar a los nenes al jardín y a la guardería. Aunque estaba en compañía de ella, permanecía muy callado, e Ivana se dio cuenta de inmediato.

Ivana: Amor…estás bien? (mirándolo)
Sebastián: No me digas amor, ni se te ocurra (dijo manteniendo la mirada al frente y tomando un sorbo de café)
Ivana: Ay por qué estás tan agresivo eh? Me preocupo por vos, y como te veo mal te pregunto qué te pasa (dijo haciéndose la preocupada)
Sebastián: No me interesa Ivana, no me hables ni me preguntes nada, vos te pensas que después de lo que hiciste vamos a volver a estar juntos como antes? Te pensas que voy a poder actuar con total normalidad haciendo de cuenta que está todo bien y que nunca pasó nada? Vos estás loca si crees eso (dijo clavándole la mirada como un puñal)
Ivana: (acabando con su paciencia, apoyó la taza de café sobre la mesa con total agresividad, dejando a Sebastián algo sorprendido por su agresividad) Escuchame una cosa Sebastián, a vos no te quedó claro como son las cosas? digo…porque parece que definitivamente querés que tu mujercita pague las consecuencias de tus actos no? (mirándolo fríamente)
Sebastián: No…no quise decir eso (con miedo por Carina), no la metas a Carina en todo esto, por favor
Ivana: Depende de vos que la meta o no, así que haceme el favor de comportarte como un buen marido, y satisfaceme sin que tenga que pedírtelo querido, estamos de acuerdo? (esperando una respuesta)
Sebastián: Si (dijo de mala gana, sintiéndose obligado a responder a aquella pregunta)
Ivana: Bien, ahora quiero desayunar en paz (dijo tomando otro sorbo de café, mientras Sebastián se tragaba toda la ira y la bronca que sentía al no poder hacer nada para revertir lo que había pasado con Carina, y tampoco para frenar las maldades de Ivana, simplemente debía seguir adelante como pudiera).

Una vez en Pampa Carina se encontraba en la puerta de grabaciones fumando un cigarrillo junto a Sol, mientras compartían una charla.

Sol: Y…cómo estás?
Carina: Bien…como puedo (dijo fumando una pitada)
Sol: Como podés? (dijo mirándola) por favor Carina mirate, estás re mal, y es por mi hermano no?
Carina: Y si Sol, que querés que te diga, por más que quiera negarlo no puedo, ese hijo de puta se metió en mi corazón y ya está…no puedo hacer nada (dijo suspirando)
Sol: Pero si se aman…por qué no hacen algo para arreglarse? Ustedes tienen que estar juntos Cari
Carina: Sabés que no se puede, él me dejó, con la excusa de cuidarme a mí y a mi hijo pero la realidad es que es un cagón, y no tiene los pantalones suficientes como para decirle a la otra yegua que se terminó y que no la quiere más, está bien…yo sé perfectamente que esa mina está loca, pero tampoco es una asesina serial, no creo que se anime a tanto, no sé…decime vos, es tu cuñada no? (mirándola)
Sol: Y…mirá, yo por Ivana no meto las manos al fuego, esa mujer es impredecible, hoy es una cosa y mañana otra, está re loca
Carina: Está bien, pero de todas formas…no habían otras opciones en vez de dejarme? Podíamos seguir adelante con este problema juntos, acompañándonos, ayudándonos, pero no, él lo quiso así
Sol: Bueno pero igual entendelo Cari, es demasiada presión para él, no es fácil convivir con una mina que no ama y que encima está totalmente desquiciada, también quiere cuidar a sus hijos
Carina: Yo eso lo entiendo perfectamente Sol, soy madre…y haría lo que fuera por mi hijo, pero no abandonaría al hombre que amo, por nada en el mundo…lucharía por tener una vida junto a él, una familia, y sobre todo paz…que es lo que tanto necesitamos
Sol: Yo sé, y también te entiendo a vos, creeme, pero Sebastián solo quiere cuidarte…a vos y a tu hijo, quiere sacarlos de todo este quilombo que empezó Ivana. Yo no sé hasta donde pueda llegar esta mina, pero lo que sé es que ustedes tienen que estar juntos a pesar de ella y de todo el que se quiera interponer en su relación, es así
Carina: Ojalá todo fuera tan fácil Sol, yo te juro que en este momento no sé qué es lo que quiero, ni lo que pienso, ni nada boluda, estoy tan…confundida, tan mal (fumando otra pitada y con la mirada penetrante hacia el frente)
Sol: Sacando todo ese mambo que tenés en la cabeza, te voy a hacer una pregunta…que es lo más importante de todo y lo único que interesa en este momento, lo seguís amando? (dijo buscándole la mirada)
Carina: (dio una última pitada, y apagó el cigarrillo en el piso, luego la miró a Sol y le dijo) Por supuesto que lo sigo amando, como el primer día Sol, pero al parecer eso no es suficiente
Sol: Claro que es suficiente pelotuda, qué decís? Fuera de todos los quilombos que tienen, lo único que realmente importa y que los saca adelante es el amor que se tienen el uno por el otro (Carina agachó la mirada) Mirame boluda, mi hermano te ama…y daría su vida por vos y los tuyos con tal de verte feliz, y creeme que en este momento está sufriendo muchísimo por vos, no la está pasando nada bien. En mi opinión estaría bueno que hablaran y que se escucharan los dos, pero sin discutir, que conversen como dos personas civilizadas y se comprendan…después de todo ustedes nacieron para estar juntos (dijo sonriendo)
Carina: Suena lindo lo que decís, pero es mucho más complejo que eso, yo no niego que esté sufriendo…pero yo también sufro, por tantas cosas y sin embargo sigo adelante. Yo…no sé que vaya a pasar de ahora en más, pero lo amo…y nunca lo voy a dejar de amar, porque lo tengo clavado en mi, que se yo…quizás lo mejor sea dejar todo esto en manos del destino y no hacerme más la cabeza (dijo levantándose del piso) Me voy a mi camarín porque tengo sesión de maquillaje Sol, nos vemos (le da un beso y se va)
Sol: (se quedó sentada en el suelo, pensando…y sonriéndose así misma) En manos del destino…(dijo repitiendo la frase que había dicho Carina) si…el destino, tal vez yo pueda darle una manito al “destino” (dijo haciendo las comillas y sonriendo intrigantemente, luego de que se levantara y se fuera).

Sebastián había llegado a Pampa y se dirigió a su camarín en silencio, ya que había empezado el día de muy mala gana entre discusiones con Ivana, recuerdos de la noche anterior, mucho trabajo sumado al estrés, en fin…no era un buen día para él. Por lo que en ese momento había agradecido no encontrarse con Carina por los pasillos o en piso. Pero no tuvo demasiada suerte…ya que camino a su camarín se encontró con Segundo…quien salía del suyo.
A primera impresión se podía describir la ira que recorría sobre la mirada de Sebastián al ver a “su amigo” desde que había comenzado la tira, ahí parado, mirándolo con culpa…porque podía percibirlo en su mirada, sin duda alguna sabía perfectamente lo que había hecho y no podía esconderlo. Sin pensarlo Segundo se acercó hasta él.

Segundo: Hola Sebas (dijo con la mirada culposa)
Sebastián: Y todavía tenés la caradures de venir a saludarme como si nada? (dijo enojado)
Segundo: Esperá, ya sabés lo que paso entre…(se queda en silencio y Sebastián continúa la frase)
Sebastián: Entre vos y Carina, si si ya lo sé (observándolo con furia)
Segundo: Y cómo te enteraste? Te contó ella?
Sebastián: No me contó nada, yo los vi con mis propios ojos, así que no me lo vas a poder negar traidor
Segundo: No esperá Sebas no me digas así, yo puedo explicarte, a eso venía justamente porque…no pensaba negártelo, para nada (dijo disculpándose)
Sebastián: Y qué carajo me vas a explicar según vos? que sos un cagón y que te comiste a mi mujer? A la mujer que amo? Eso me vas a decir? (tratando de no gritarle frente a todos)
Segundo: No, no es así, yo…me equivoqué, los dos nos equivocamos, fue un desliz nada más, pero no fue más que un beso…te lo juro
Sebastián: Y ahora yo tengo que creerles, yo los vi besándose, pero cuando me fui no sé que pasó, decime la verdad Segundo…te acostaste con Carina?
Segundo: Seba, yo no…(interrumpe)
Sebastián: Te acostaste con Carina si o no! (dijo sacado, mientras todo el estudio se quedó mirándolo sin entender de qué hablaba)
Segundo: Tranquilizate que estás llamando la atención de todos
Sebastián: Me importan un carajo los demás, contestame ya
Segundo: Ya te dije que no, nunca me acosté con Carina, no podría haberlo hecho, a ver Sebastián…ella te ama a vos pelotudo, cuándo lo vas a entender?
Sebastián: (solo se quedó mirándolo)
Segundo: Te estoy diciendo la verdad, cuando nos besamos ella se dio cuenta que había sido un error, al igual que yo, somos amigos y nada más que eso, hablamos de tantas cosas del pasado que nos lastimaron…y también cosas actuales y bueno, con confundimos, pero te juro que no fue más que eso, sino preguntale a ella
Sebastián: No tengo nada que preguntarle, ustedes sabrán lo que hicieron o no, pero te cagaste en mi Segundo…se hayan confundido o no, te cagaste en mi, eras mi amigo (dijo dolido)
Segundo: No me digas así Seba por favor, te pido perdón…me arrepiento con toda el alma de haberme dejado llevar así, perdoname por favor…
Sebastián: No puedo perdonarte algo así Segundo, lo hubieras pensado antes, yo nunca te traicionaría de esa forma a vos, que te quede claro
Segundo: Está bien…soy un imbécil por lo que hice, y no te voy a molestar más, solo prometeme que lo vas a pensar y que me vas a poder perdonar, por favor…(casi suplicante)
Sebastián: Al menos por ahora no voy a poder perdonarte, con el tiempo quien sabe, ahora me voy, permiso (dijo seriamente)
Segundo: (suspiró y agachó la mirada siguiendo rumbo a piso)

Horas después Carina estaba en su camarín retocándose el maquillaje, casi lista para salir a grabar una de las últimas escenas del día, cuando escucha un ruido extraño desde la puerta. Habían deslizado una nota por debajo de la puerta, con letra impresa…que decía: “Necesito hablar urgente con vos, grabá la última escena y cuando termines esperame en tu camarín. Sebastián.”
Carina al leer esta nota le pareció demasiado extraño, ya que, qué tendría que hablar Sebastián con ella? Desde del día anterior que habían discutido no habían vuelto a cruzar palabra, pero así y todo lo creyó, y aunque no tenía demasiadas ganas de hablar con él decidió salir a grabar las 3 últimas escenas que le quedaba, y después esperarlo en su camarín como decía la nota.

Sebastián por su parte también se encontraba en su camarín, cuando de repente ve una nota deslizarse por debajo de su puerta, la tomó con extrañez y leyó que decía: “Necesito hablar urgente con vos, grabo la última escena y cuando termine acercate a mi camarín. Carina.”
Sebastián cuando leyó la nota se imaginó que quizás quería hablar con él por lo que había pasado con Segundo, que seguramente quisiera darle alguna explicación, pero él no la aceptaría…o al menos eso creía. Pero así y todo decidió aceptar y quedarse en su camarín hasta que Carina terminara de grabar.

Pasaron casi dos horas y Carina volvió a su camarín para cambiarse de ropa, y así poder hablar tranquilamente con Sebastián.
Terminó de cambiarse y siente que tocan la puerta. Abre y se encuentra con Sebastián.

Carina: Hola…(dijo con algo de vergüenza)
Sebastián: Hola…(algo tímido pero a la vez enojado)
Carina: Pasá (dijo abriéndole la puerta)
Sebastián: (ingresa)
Carina: Sentate si querés
Sebastián: No, estoy bien así, gracias (en ese momento se tornó un silencio que duró prácticamente 10 segundos, pero que fue una eternidad para ambos)
Carina: Bueno este…decime, te escucho (dijo mirándolo)
Sebastián: Cómo te escucho, pensé que vos querías hablar conmigo, no yo
Carina: Cómo? (dijo confundida) vos me mandaste una nota Sebastián, qué decís?
Sebastián: Yo no te mandé nada, vos me mandaste una nota a mi (igual de confundido)
Carina: Qué carajo? (mirando hacia todos lados) y entonces quién mierda nos citó acá?
Sebastián: No tengo la más puta idea, alguno que tenía ganas de hacernos una broma parece, sin saber que yo no estoy de humor para esas pelotudeces (dijo serio)
Carina: Y te pensás que yo si? (quedándose en silencio, cuando de repente escuchan una llave que trababa la puerta del camarín, dejándolos completamente encerrados) escuchás? Nos están encerrando! (gritó acercándose rápidamente a la puerta) hey! Quién está ahí afuera? Abrinos la puerta!
Sol: No van a salir de ahí hasta que arreglen las cosas me escucharon? Así que si quieren salir depende de ustedes
Sebastián: Ahh noo Sol yo te mato! (dijo enojado) abrinos ya!
Sol: Ya dije que no
Carina: Sol la puta madre abrí la puerta! Estás loca? Voy a gritar (dijo amenazándola)
Sol: Gritá todo lo que quieras, me aseguré de que no quedara nadie en el estudio, solo ustedes dos, así que hablen tranquilos…que tienen toda una noche para hacerlo (riendo) buenas noches! (dijo yéndose)
Sebastián: Sol hija de puta volvé! Sol!
Carina: Sol! Abrinos por favor! La puta madre que te parió!
Sebastián: Ya se fue, así que ni te gaste en seguir gritando (dijo sentándose en el sillón y quedándose en silencio)
Carina: Y ahora qué hacemos? (mirándolo)
Sebastián: Y nada que vamos a hacer, sentarnos a esperar a que amanezca
Carina: Vos estás loco? Yo ni en pedo paso la noche acá con vos, tenemos que pedir ayuda
Sebastián: Ayuda a quien? No te das cuenta que no hay nadie? Dios…rubia tenías que ser (dijo por lo bajo)
Carina: No me jodas pelotudo (dijo enojada)
Sebastián: Bueno fue un chiste, para descontracturar un poco (dijo riéndose)
Carina: Chiste las pelotas, no estoy de humor, y encerrada así menos…quiero salir de acá ya
Sebastián: Sol dijo que hasta que no habláramos no íbamos a salir de acá, y creeme que no miente
Carina: Uff como conocés a tu hermana eh, te felicito (dijo irónicamente), yo ya te dije que no pienso pasar la noche acá con vos, así que hacé algo
Sebastián: Por qué no? me tenés miedo? (dijo mirándola pícaramente)
Carina: Miedo yo a vos? no rompas las pelotas, simplemente no quiero dormir con vos al lado (desviando la mirada)
Sebastián: Porque me tenés miedo (ríe), quedate tranquila que no te voy a hacer nada eh…ni siquiera me llamás la atención Zampini, eso era antes (dijo mintiéndole para hacerla enojar)
Carina: Ay pero qué te crees, que vos a mi si? bajate del pony Estevanez, que no sos más que un pelotudo con buenos tubos, dejate de joder (descansándolo)
Sebastián: Auch, eso dolió, sos agresiva cuando querés eh (observándola)
Carina: Entonces no me provoques (haciendo una mueca)
Sebastián: No no, no te provoco, no te provoco como lo hace Segundo no? (dijo mirando para otro lado, sabía que después de eso discutirían)
Carina: Qué decís? (dijo mirándolo)
Sebastián: Nada nada, dejalo ahí (ignorándola)
Carina: No no, ahora me decís
Sebastián: De que te vi besándote con Segundo, en tu casa, ni te gastes en negármelo porque Segundo me dijo todo, son increíbles los dos eh
Carina: Vos estuviste en mi casa? (dijo sorprendido)
Sebastián: Todavía tengo la copia de llaves de tu casa Carina, pensaba ir a hablar con vos pero me encontré con una sorpresita (dijo serio)
Carina: Esperá, tampoco es como vos pensás, nos besamos…nada más
Sebastián: Ya me lo dijo Segundo así que no te preocupes, al menos no vas a poder mentirme
Carina: Mentirte? Mirá…yo no soy ninguna mentirosa, y tengo los ovarios suficientes como para encararte y decirte todo en la cara, así que no me trates de mentirosa ok?
Sebastián: Si seguro, si no sacaba el tema yo, estoy seguro que no me lo habrías dicho Carina
Carina: Te lo habría dicho, claro que si, y…(se queda en silencio y luego continúa) pero esperá, por qué tendría que decirte y darte explicaciones a vos? que yo sepa vos y yo ya no somos nada, así que no te corresponde preguntar ni saber nada de lo que yo hago
Sebastián: Entonces a vos tampoco de mi
Carina: Tampoco quiero saber de vos, digo…
Sebastián: No se nota, porque bien que le preguntas a mi hermana por mi (dijo dejándola callada)
Carina: Yo…eso…(pensando por dentro “Sol te voy a matar!”) eso es mentira
Sebastián: Ah si? no me digas (irónico)
Carina: Bueno callate! No quiero hablar más del tema, se acabó, yo con mi vida hago lo que quiero, así como vos con la tuya (mirando hacia otro lado)
Sebastián: Por supuesto (dijo mirándola) y que bien que empezaste a rehacer tu vida, con mi amigo (sonríe sarcástico)
Carina: Bueno cortala! Dios no te banco más Sebastián, sos insoportable! (histérica)
Sebastián: Vos también lo sos, y me la tengo que bancar nena
Carina: Callate, inmaduro de mierda (dijo enojada)
Sebastián: Rubia pelotuda (le devolvió el insulto)
Carina: (lo miró desafiante) Cagón!
Sebastián: Conchuda
Carina: Dios! (dijo completamente irritada por Sebastián, se levantó del sillón para dirigirse al baño cuando de repente Sebastián le coloca el pié haciendo que caiga al suelo, mientras él se hace el que también tropieza y cae sobre ella)
Carina: Pero qué hacés pelotudo! (dijo enojada tratando de sacarlo de encima)
Sebastián: Sos una hija de puta, pero así de conchuda y todo…te amo igual (dijo mirándola a los ojos, mientras comenzó a besarla con pasión, saciando esa sed de amor que venían acumulando los dos desde hacía tiempo, y volviéndose a sentir cuerpo con cuerpo y labios con labios…tal y como la primera vez.)



CONTINUARÁ…


martes, 1 de octubre de 2013

AMOR CLANDESTINO CAP 66 "Clavo que saca otro clavo"

AMOR CLANDESTINO

ANTES…

Sebastián no podía explicar con palabras lo que sintió en ese momento, la angustia que comenzó a invadirlo de a poco, solo sabía perfectamente que su amor no podía terminar así, porque los dos se amaban intensamente…y no era justo. Así que se juró así mismo que lucharía por Carina costase lo que costase.


CONTINUACIÓN…

Pasaron 2 meses desde la última vez en que Carina y Sebastián habían hablado de aquella pelea que los terminó separando, y del último beso que sus labios se habían regalado. Fue como la última despedida…una despedida que les dolió extremadamente a ambos.

Sebastián continuaba con Ivana, tratando de llevar la mejor vida posible a su lado, ya que convivir con ella sin amor para poder seguir fingiendo ante las cámaras y amigos era demasiado difícil, algo que le costaba demasiado anímicamente.
Demás estaba decir el sufrimiento de tener que estar con Ivana mientras aún seguía amando con la fuerza de sus entrañas a Carina, realmente era algo que lo mataba por dentro. Pero sacaba fuerzas de sus hijos para seguir adelante.

Carina esos dos últimos meses había sufrido mucho la separación con Sebastián, pero con el tiempo pudo ir procesándolo y adaptándose a  la idea de que quizás ya nunca regresarían, y que a  pesar de todo ella lo seguiría amando como el primer día…sin poder estar junto a él.
Así que decidió que debía continuar con su vida…que no podía seguir así, las lágrimas habían sido demasiadas y ella ya estaba cansada de sufrir, así que decidió pensar en otras cosas. En cosas que le hicieran bien y cosas que le gustaría hacer al correr el tiempo.

Demás estaba agregar que las grabaciones del programa entre Carina y Sebastián habían comenzado a ser mucho más dificultosas, la química que los unía desde un principio ya no estaba, las sonrisas y miradas cómplices tampoco habitaban en el set, y los chistes de por medio habían desaparecido por completo. Simplemente se respiraba todo el tiempo un ambiente tenso, lleno de tristezas y resentimientos entre ambos…algo que percibían el resto del estudio, ya que los conocían demasiado a ambos, a pesar de que no todos  estuvieran al tanto de su relación.

Estudios Pampa: 15:00 hs (Hora de descanso y almuerzo)

Carina almorzaba en el bar junto a Segundo quien le estaba haciendo compañía, entre una charla de por medio.

Segundo: Y…? Cómo vas con las escenas?
Carina: Bien…ahí van (dijo mientras tomaba un poco de agua)
Segundo: Mmm…no te escuchás bien, y no creo que sea por las escenas, o me equivoco?
Carina: No…la verdad no te equivocás…(dijo suspirando)
Segundo: Contame Cari, qué pasa? (prestándole atención)
Carina: Me pasa que…(suspira) todo me pasa (agachando la mirada)
Segundo: Bueno tranquila, vamos despacio si? Empezá desde el principio y contame
Carina: Está bien, lo que pasa es que…no puedo más Segundo, te juro que no puedo más (dijo no pudiendo evitar quebrarse frente a él, comenzando a llorar desgarradoramente…y Segundo al verla así tuvo el instinto de levantarse y abrazarla fuertemente, para calmar tan solo un poco su dolor)
Segundo: Shh…tranquila Cari tranquila, está todo bien (sobándole la espalda suavemente, mientras las miradas de todos en el bar se posaban en ellos, aunque la peor…fue la de Sebastián quien los observó mientras iba entrando al bar, y se quedó perplejo ante semejante escena)
Carina: (al notar que todos los estaban mirando decidió separarse de Segundo, y mientras se limpiaba los restos de lágrimas en sus ojos le dijo a Segundo que se retiraran del lugar, ya que no era nada privado para poder hablar, y menos con la presencia de Sebastián allí)
Segundo: Está bien, vamos donde quieras Cari (dijo siguiéndola mientras Sebastián le clavaba la mirada)
Carina: (caminó hacia adelante cuando se topó con la mirada fija de Sebastián sobre ella, lo que la incomodó bastante…pero decidió no darle importancia y seguir con la mirada hacia al frente, mientras tomaba a Segundo de la mano para que la acompañara…detalle perfectamente percibido por Sebastián, quien cuando se dio cuenta no pudo evitar enfurecerse ante la provocación).

Así fue que Carina salió del bar de la mano de Segundo, no sabía exactamente por qué lo había hecho, quizás para que Sebastián los viera? Si…seguramente para hacerlo sentir aunque sea tan solo un poco mal, para que supiera como se había sentido ella el día que la dejó, y más con la sola idea de que se imaginara que entre Segundo y ella estaba pasando algo, era un simple castigo de su parte.

Carina se dirigió a su camarín para poder hablar con Segundo más tranquilos y sin interrumpciones.

Segundo: Bueno ahora si podemos hablar, me vas a contar qué te pasa? (dijo mirándola)
Carina: Si, yo…(suspira) bueno creo que vos sabías lo mio con Sebastián no?
Segundo: Si si sabía, no mucho pero algo sabía, qué pasó con eso? (algo confundido)
Carina: Lo que pasa es que…me dejó, no me preguntes por qué…es demasiado largo y complicado de explicar, pero…te juro que estoy destruída, ya pasaron 2 meses y todavía sigo sintiendo el mismo dolor…la misma angustia de no poder estar con él, es tan…(queriendo llorar nuevamente)
Segundo: Tranquila, desahogate tranquila Cari (tocándole el hombro) la verdad te entiendo…yo pasé por algo así cuando me separé de mi ex esposa, sufrimos mucho los dos pero…después entendí que era lo mejor para los dos, no nos servía seguir estando juntos cuando tantas cosas habían cambiado (suspira) a veces la separación es algo bueno que puede pasar entre una pareja…para poder ser libre y que cada uno aprenda a volver a amar a otra persona, eso me pasó a mi, y hoy en día ya lo superé gracias a Dios y al bendito tiempo (dijo sonriendo a medias)
Carina: Mmm…(suspira), ojalá yo pensara así, ojalá sintiera así…pero no puedo, lo mio es mucho más complejo, yo…estoy completamente enamorada de Sebastián…y sé perfectamente que nunca lo voy a dejar de amar, así pase el tiempo, la vida, y tantas cosas más…porque hemos vivido tantas cosas juntos y sin embargo el amor nunca se acabó, seguramente eso es una señal…o eso es lo que creo, pero tampoco me olvido que sufro mucho por él…y que nuestras historias son muy complicadas, nuestra relación es complicada…y vos sabés por qué, no hace falta que entre en detalles (dijo tocándose la manga de su polera como forma de distracción)
Segundo: Si obvio que lo sé, y tenés razón…es muy complicado lo que les pasa, pero bueno…ninguno de los dos tienen la culpa de haberse enamorado, son cosas que pasan
Carina: Si ya se, pero realmente es algo que nunca debería haber pasado (dijo tristemente)
Segundo: No digas eso, quizás después te arrepientas (mirándola a los ojos)
Carina: Hoy en día no lo sé…(dijo suspirando)
Segundo: (se acerca más a ella) Tranquila, todo va a estar bien si? Todo tiene solución, y el dolor…con el tiempo pasa (dijo acariciándole la espalda)
Carina: No estoy tan segura de eso
Segundo: Ahora no lo vas a estar, pero más adelante…quien te dice, quizás…esto que te está pasando es solo una prueba, para demostrar lo fuerte que sos, y para…empezar una nueva vida…o no? (le dijo mientras la miraba a los ojos fijamente)
Carina: Una nueva vida? A qué te referís? (dijo sin entender)
Segundo: Si, una nueva vida…con una nueva persona…(se acerca un poco más a ella y coloca su mano en la suave mejilla de Carina) vos sos muy hermosa Carina…y sos una gran mujer, creo que te merecés a alguien que esté dispuesto a dejar todo por vos…(dijo con total sinceridad)
Carina: (solo se dejó acariciar…y escuchó con atención a Segundo)
Segundo: Y…no quiero incomodarte pero…no sé, yo podría cuidarte…(le dijo tiernamente)
Carina: (sonrió con una leve sonrisa que se desprendió de sus labios y se quedó mirándola, a la expectativa)
Segundo: (sonrió al verla sonreír…y luego acercándose un poco más la tomó del rostro y la besó con extrema dulzura y delicadeza)

Carina se dejó llevar por ese beso que había iniciado Segundo, quizás era el despecho…o la falta de afecto emocional, lo que hacían que en ese momento ella se estuviese dejando besar nada más ni nada menos que por su amigo y su compañero de trabajo Segundo.
El beso duró solo unos minutos, ya que Carina al notar lo que estaba haciendo se separó de inmediato.

Segundo: Perdoname Cari yo…no debería haber hecho eso, perdón (dijo alejándose de ella y disculpándose por tan inhibido impulso)
Carina: Está bien no te preocupes, yo…(nerviosa) me tengo que cambiar (dándole a entender que saliera de su camarín)
Segundo: Te enojaste? (dijo preocupado)
Carina: No no para nada
Segundo: Me gustaría recompensar el pedo que me mandé con vos Cari, enserio no quise incomodarte…y mucho menos ofenderte, solo fue un impulso, te vi mal y…no pude evitarlo (dijo disculpándose nuevamente)
Carina: Enserio está todo bien Segundo, yo tampoco tendría que haberme dejado besar (ríe sin ganas)
Segundo: Bueno pero igual, me aceptarías una cena esta noche para recompensar el mal momento? (dijo amablemente)
Carina: Una cena? Esta noche? (no estaba del todo segura)
Segundo: Si…te prometo que una cena solo como amigos, lo de hace un rato no va a volver a pasar (dijo sonriendo)
Carina: (lo pensó unos segundos y al final aceptó) Está bien…(sonríe)
Segundo: Genial, a las 10?
Carina: A las 10 estoy en tu casa (sonríe)
Segundo: Te espero (dijo mientras le sonreía tiernamente) bueno te dejo cambiar tranquila, nos vemos esta noche señorita (saludándola y retirándose del camarín)
Carina: Dale (sonríe)

Se hicieron las 18:30 de la tarde y a Carina le tocaba el horario de salida de Pampa, así que al terminar de grabar sus últimas escenas que para su suerte no habían sido con Sebastián, se dirigió a su camarín a cambiarse de ropa y a recoger sus pertenencias, y al finalizar saludó a sus compañeros de trabajo y se dirigió a la playa de estacionamiento de Pampa.
Cuando iba saliendo siente unos firmes y robustos dedos tomándola fuertemente de su brazo izquierdo, así que por inercia se dio la vuelta para ver quien era y se encontró con Sebastián, mirándola con una furia entrañable en sus ojos.

Sebastián: Qué mierda estás haciendo con Segundo? Están saliendo? (dijo enojado)
Carina: Qué te pasa? Soltame Sebastián (dijo tratando de zafar de su agarre en dos intentos fallidos)
Sebastián: No te suelto un carajo, contestame ya Carina, qué pensás hacer con él?
Carina: Y a vos qué mierda te importa? Vos estás con tu mujer, tenés tus hijos, tu familia, y por si te olvidaste nosotros terminamos, y no fue precisamente decisión mia, así que a mi dejame en paz (dijo queriendo seguir su camino hacia su auto pero Sebastián se lo impidió)
Sebastián: No te vas! (dijo agarrándola más fuerte aún) vos no podes estar con Segundo, él es mi amigo! Además…ustedes no se quieren, por qué saldrían? (dijo tratando de satisfacerce así mismo con sus propias preguntas)
Carina: Y eso qué tiene que ver? Vos a Ivana no la amás, y sin embargo estás con ella, no sería una situación muy diferente no? (dijo irónica)
Sebastián: No es lo mismo Carina, sabés que no
Carina: Mirá Sebastián estoy cansada, cansada de todo! Así que te pido por favor que no me molestes más, vos hacé tu vida que yo voy a hacer la mía (haciendo que Sebastián la soltara, y comenzó a caminar hacia adelante)
Sebastián: Carina!...(ella se detiene, pero no da vuelta la mirada) qué se supone que vas a hacer con Segundo? Usarlo? (dijo enojado)
Carina: (se da vuelta de inmediato y le grita en la cara) Olvidarte!...eso es lo que voy a hacer…(al finalizar caminó hasta su auto, se subió en él y se retiró del lugar, dejando a Sebastián con más de mil preguntas y pensamientos en su mente)

Al llegar las 10 de la noche Carina ya se encontraba en casa de Segundo, donde llegó con una botella de vino blanco…que aunque no fuera de su agrado le pareció que quedaría bien una buena botella de vino fino para compartir con Segundo.
Una vez ya bastante cómoda en la casa de Segundo disfrutaron de una rica cena, entre charlas y risas de ambos, sobre sus vidas y anécdotas del trabajo.
Era la 1 de la mañana y como ya era algo tarde Carina decidió irse.

Carina: Bueno Segu me voy yendo porque es tardísimo y mañana hay que laburar otra vez
Segundo: Si mal, pero quedate un ratito más, la estabamos pasando muy bien (dijo pidiéndole que se quedara)
Carina: Me encantaría pero enserio me tengo que ir, lo dejamos para otro día dale?
Segundo: Bueno está bien, viniste en tu auto?
Carina: En realidad no, lo dejé ayer en el taller por un problemita técnico así que me he estado manejando en remis
Segundo: Entonces permitime al menos que te lleve a tu casa, por favor
Carina: Mm…bueno está bien (sonríe)
Segundo: Dale, busco el saco y nos vamos (sonríe)

Segundo busca su saco y se predispone a llevarla a Carina a su casa.
Cuando llegan a Haedo Segundo estaciona su auto en el puente de la casa de Carina y se quedan unos segundos en silencio.

Carina: Bueno em…(pensó unos momentos en que Segundo había hecho demasiado por ella, así que se decidió por invitarlo a pasar a tomar un café, al menos para pagarle de alguna forma tanta amabilidad) no querés pasar a tomar un café y después te vas? Digo…si querés obvio
Segundo: (sin dudarlo) Por supuesto, me encantaría (sonríe)
Carina: Bueno vamos entonces (sonríe)

Carina entra a su casa con Segundo de atrás, mientras alguien de la calle de enfrente en su camioneta negra los observaba sigilosamente. Si, Sebastián. Quien había estado siguiendo a Carina durante toda la noche desde que la vio salir con Segundo de la mano, y supo que en algún momento se econtrarían así que decidió averiguarlo por sus propios medios.
Y grande fue la sorpresa que se llevó, al verlos entrar juntos a la casa de Carina. Pero no se iba a quedar de brazos cruzados, tenía que saber más…tenía que verlos…pensó.

Una vez adentro Carina preparó dos posillos de café e invitó a Segundo a sentarse en el sillón del living. Donde disfrutaron del café y continuaron con aquella charla en la cena que había sido interrumpida previamente.

Segundo: Bueno…ahora creo que debería irme yo (ríe)
Carina: Si…(ríe)
Segundo: (apoya la taza sobre la mesita ratonera) Nos vemos mañana entonces
Carina: Seguro
Segundo: (se queda un momento mirándola) Antes de irme quiero que sepas que contás conmigo para lo que sea Cari, sos mi amiga y no voy a dejarte sola (dijo mirándola)
Carina: Gracias…la verdad me hace bien saberlo (sonríe)
Segundo: Que bueno (sonríe) y…tenés que estar bien, nadie merece tus lágrimas (le acarició suavemente la mejilla)
Carina: (mientras Carina cerraba los ojos profundamente…para luego abrirlos y mirarlo atentamente)
Segundo: Qué pasa? (dijo sin entender su reacción)
Carina: Pasa que después de esto voy a ser yo quien tenga que pedirte perdón (dijo profundizando su mirada…besándolo sin dejarlo pensar, ni darle tiempo a alguna respuesta que no quisiera escuchar).

Sebastián se había bajado de su camioneta, y estaba sacando la copia de llaves que Carina hacía un tiempo atrás le había otorgado para poder tener acceso a ella cuando quisiera. Realmente estaba dispuesto a entrar y a encontrarse con lo que se tuviera que encontrar.
Abrió la puerta lentamente sin hacer ninguna clase de ruido, y al entrar escuchó mucho silencio, así que caminó unos pasos hasta llegar al borde del living…donde se encontró con lo que esperaba, o con lo que temía encontrarse…
Mientras una lágrima recorría lentamente su mejilla.








CONTINUARÁ…