AMOR
CLANDESTINO
ANTES…
Carina: (mordió sus labios
sensualmente y le dijo) dejá de hablar y haceme el amor ya (casi completamente
desquiciada de pasión)
Sebastian: (percibió la
picardía en su mirada y no esperó un solo segundo mas, la tomó fuerte de su cintura
y rodaron en la camilla quedando él arriba de ella…eran tantas las ganas que
tenía Carina que se arrancó el suero con una fuerza que nadie hubiera
imaginado, Sebastián la miró sorprendido y ella no le dio ni tiempo a que le
reprochara, directamente lo calló comiéndoselo a besos…y mordiéndolo con
infinito ardor y deseo…)
CONTINUACION…
Sebastian: (entre besos y
caricias Sebastian tomó conciencia del lugar en donde estaban, cosa muy extraña
en él porque generalmente la que ponía los límites siempre era Carina, pero
esta vez asombrosamente fue él quien sentía que debían parar…aunque
sinceramente ni su cuerpo ni su corazon quisieran hacerlo…) Amor…amor esperá
(tratando de detener a Carina que lo besaba muy apasionadamente)
Carina: que, que pasa?
(preguntó confundida)
Sebastian: paremos por
favor
Carina: eh? Pero por
qué…te sentís mal? (no entendía que le pasaba)
Sebastian: no no, no es
eso, es que…no se, creo que no estamos en un lugar como para hacerlo acá no te
parece?
Carina: (comenzó a reir)
Sebastian Estevanez…vos el rey de la diversión me venís a decir que te parece
que no es el lugar indicado para que hagamos el amor? Jajajaja no no, me estás
jodiendo no? (preguntó bromeando)
Sebastian: jajaja si si lo
se amor, te parecerá rarísimo pero…esta vez creo que no está bien, no se…hay
gente en el hospital, mirá si el resto de los internados nos escuchan? (algo
nervioso)
Carina: y…que deberían
escuchar? (preguntó con mirada pícara)
Sebastian: amor…vos sabés
bien a lo que me refiero (dijo riendo)
Carina: mmm…vos tenés
miedo de que escuchen cuanto disfrutamos? (provocándolo) y…que escuchen mis
gemidos? (con voz muy sexy, realmente Carina estaba irreconocible, ni siquiera
el mismo Sebastian reconocía a esa Carina alocada y con tantas ganas de romper
las reglas…sí sabía muy bien que cuando quería y la situación lo acontecía ella
podía pasar de ser un ángel bello y delicado a ser un completo demonio envuelto
en pasión, fuego y salvajismo, pero tenía que aceptar que Carina era una cajita
llena de sorpresas que los sorprendía cada día mas)
Sebastian: amor…(dijo
sorprendido) estas loquita o me parece a mi? (jugando con ella)
Carina: no te parece,
estoy loquita (riendo pícara y mordiéndose los labios para provocarlo aún mas)
Sebastian: noo por favor
no me hagas asi , no te muerdas los labios que me vuelvo loco, te lo pido por
favor (decía tratando de resistirse a sus encantos)
Carina: ah si? (pícara)
mucho mucho?
Sebastian: demasiado…no
seas malita, dale (le pedía por favor)
Carina: yo malita? Enserio
te parezco mala? (se iba subiendo arriba de él, haciendo que no pudiera
resistir mas)
Sebastian: y…cuando me
provocás asi si amor, sos tremenda (ríe)
Carina: jajaja apa…soy
tremenda entonces (con su mano acariciaba el torso de Sebastian, levantándole
la remera suavemente y él se dejaba…ya que no podía interponerse ante semejante
invitación)
Sebastian: ayayyy Carinaa
no me toques asi por favor! Como me ponés diosss (gritaba, mientras ella con
suavidad seguía acariciándole el torso, de una forma tan sensual que hacía que
él delirara con cada rose de su piel, definitivamente ella sabía muy bien como
provocarlo y sobretodo como convencerlo cuando a ella se le antojara) que se
supone que es esto tramposa (dijo mirándola)
Carina: mmm que estoy
tratando de convencerte? (dijo riendo sexy)
Sebastian: ya veo…y creo
que lo estás logrando (sonríe)
Carina: ah si?
buenísimo…porque ya se me estaban acabando las tácticas (dijo riendo mientras
se mordía los labios)
Sebastian: (la miró como
queriéndosela comer de un solo bocado y no esperó ni un momento mas, comenzó a
besarla desaforadamente…como saciando todas las ganas y el deseo que había
acumulado en esos 5 días sin ella, realmente no entendía como es que hacía para
tenerlo a sus pies, para que cada deseo que tuviera él se lo cumpliera sin
ningún reproche, como hacía para derretirlo de esa manera…porque ante ella se
sentía tan débil que ni siquiera podía disimularlo, a veces hasta se
avergonzada de ser tan frágil ante ella, era como si le pegara un poco a su
orgullo de hombre, pero bueno…la sensualidad, belleza y provocación de Carina
eran mucho mas fuerte que su orgullo, que su dignidad y que hasta su propia
fuerza de voluntad).
Asi estuvieron un largo
rato besándose apasionadamente hasta que decidieron entrar en acción. Sebastián
comenzó a sacarle el camisón de hospital que llevaba puesto, y una vez que se
abrió camino pudo acariciarla, disfrutar de esa piel que tanto había extrañado,
como la deseaba…como la amaba, en ese momento solo pensaba en poseerla y en
nada mas que eso. Asi que no esperó mas, la miró a los ojos esperando un “si”
de su mirada, y al obtenerlo comenzó a hacerle el amor con una infinita
desesperación por parte de ambos, se habían extrañado tanto que sentían hasta
miedo de que la noche no les alcanzara para poder fundirse en un solo cuerpo y
sentirse satisfechos por completo. Esa noche se amaron como nunca, se besaron,
se tocaron, se disfrutaron…y se hicieron el amor con mucho amor…un amor que
sabían nunca desaparecería de sus corazones.
Despues de pasar aquella
maravillosa velada juntos se quedaron profundamente dormidos, Carina recostada
sobre el pecho de Sebastian, sintiendo la ténue calidez de su piel…
La luna se había escondido
y había salido un radiante y hermoso sol que se asomaba por la ventana
desplegando sus brillantes rayos sobre el delicado rostro de Carina, que al
verla Sebastian de ese modo sintió que era un ángel dormido recién caído del
cielo, como disfrutaba de verla dormir…se veía tan frágil y tan hermosa que
hasta sentía que él era poca cosa para ella, sentía que estaba enfrente de una
diosa griega, una mujer inalcanzable…una escultura humana que solo era apta
para grandes hombres de la Tierra, pero sabía que ella lo amaba…lo amaba con
locura, y eso lo agradecería hasta el dia de su muerte.
Sacándole un pequeño
mechón rubio de su rostro comenzó a darle pequeños besitos en el cuello y
después en los labios, asi ella fue despertando.
Carina: mmm…(decía
despertándose)
Sebastian: amor…buenos
días, como amaneció el amor de mi vida? (dijo dulcemente)
Carina: hey…(desperezándose)
buenos días amor, bien y vos? (con una sonrisa en el rostro)
Sebastian: muy bien…como
no iba a despertarme bien si dormí toda la noche con la mujer que amo (dijo
mientras la besaba)
Carina: mmm (sonríe) te
amo
Sebastian: yo te amo mas (le
da un piquito) tenés hambre?
Carina: muuucha (dijo
hambrienta)
Sebastian: bueno usted se
queda acá que yo voy a buscarle un rico desayuno si?
Carina: pero no te
preocupes amor, el desayuno lo trae la enfermera en un rato
Sebastian: no no, esos
desayunos horribles y con puras preoteínas son aburridos, te voy a traer unos
desayunos como los que yo te preparaba en casa te acordás (dijo sonriéndole)
Carina: claro que me
acuerdo (se muerde el labio inferior y le sonríe)
Sebastian: mm bueno, ahí
vengo (dice mientras se levanta de la camilla y comienza a vestirse, pero
Carina lo toma del brazo impidiéndole que se vaya)
Carina: esperá…
Sebastian: que pasa?
Carina: (lo tira contra
ella y lo come a besos)
Sebastian: ahh mamaderaaa
que lindo beso! (dijo felíz)
Carina: y preparate para
los que te voy a dar después (dijo riendo)
Sebastian: voy voy! Asi
vengo rápido y me seguís dando de esos besos que me encantan (dándole otro
beso)
Carina: jaja bueno (le
limpia restos de sus besos)
Sebastian: ahí vengo eh,
quedáte aca
Carina: ok (le hace una
guiñada)
Sebastian se va para ir a
comprarle un rico y nutritivo desayuno y asi poder desayunar con ella, juntitos
como siempre.
Alejandro estaba en su
cada aún muy triste por lo que había pasado con Carina, realmente sentía tanto
dolor por no haberla valorado cuando la tenía y sobretodo de haberla lastimado
tanto, porque le había hecho mucho daño y eso él lo sabía muy bien. No podía
dejar de pensar en Carina un solo segundo cuando le suena el celular…
Alejandro: hola?
Ivanna: hola Alejandro soy
yo, Ivanna
Alejandro: ahh…hola, que
querés? (algo malhumorado)
Ivanna: epa…que pasó que
me tratás asi? No te dieron de comer anoche? (dijo broméandole)
Alejandro: mirá Ivanna no
estoy para tus bromitas asi que si solo llamaste para molestar te corto aca
(dijo muy enojado)
Ivanna: no no esperá, no
cortes, necesito que hablemos
Alejandro: otra vez? De
que?
Ivanna: del único tema que
nos compete a nosotros Alejandro, cual será? (tomándole el pelo)
Alejandro: eh…si se trata
de Sebastian y Carina te digo que no quiero saber nada, ya suficiente sufrí por
tratar de recuperarla
Ivanna: ai no te pongas
tan cursi querés? (retándolo) venís a mi casa o voy yo a la tuya?
Alejandro: no
pero…(interrumpe)
Ivanna: ok voy yo a la
tuya, esperame que en 15 minutos estoy por allá, chau chau (dijo cortando la
llamada)
Alejandro: hey…hey!
(notando que le había cortado) pero la puta madre (enojado)
Ivanna y Alejandro
volvieron a reunirse para hablar de Carina y Sebastián. Ivanna seguía con la
torpe idea de separar a Sebastian de Carina, pero no sabía que ellos en ese
momento estaban mas juntos que nunca, y que después de todo lo que le había
pasado a Carina no dejarían que nada ni nadie se interpusiera entre ellos,
entre su amor…
Había que decir que esta
vez a Ivanna le costaría mucho mas que antes separarlos, porque ellos cada vez
se hacían mas fuertes.
Alejandro no estaba del
todo seguro, realmente ya no tenía el mismo entusiasmo y las mismas ganas de
separar a Carina y a Sebastian como antes, quizás era el hecho de saber que
Carina prácticamente lo odiaba, y que si descubría que estaba complotado con
Ivanna en su contra esta vez no lo perdonaría por el resto de su vida, pero
decidió correr el riesgo, ya que por volver a tener el amor de Carina haría
cualquier cosa, asi se le fuera la vida en ello.
Las horas pasaron y se
hizo la tarde, tipo 7:00 pm, y el Doctor Funes fue a la habitación de Carina a
darle una muy buena noticia.
Carina: doctor…(dijo
sonriendo)
Doctor: hola Cari como
estás?
Carina: muy bien por suerte
Doctor: me alegro mucho,
bueno…y mejor vas a estar cuando escuches lo que te vengo a decir
Carina: ai que cosa?
Digame por favor (ansiosa)
Doctor: que te damos el
alta hoy mismo (dijo sonriendo)
Carina: aii enserio?
(felíz)
Doctor: si enserio, pero solo
con la condición de que hagas 3 dias mas de reposo en tu casa está bien?
(serio)
Carina: si si doctor por
supuesto, lo que sea con tal de salir de acá, ya quiero irme (decía
levantándose)
Doctor: esperá no tan
rápido che jaja
Liliana: hija…(ríe)
Carina: que pasa? Ai es
que no aguanto estar mas postrada en esta cama mami, me siento inválida (dijo
haciendo una mueca)
Liliana: no exageres jajaa
Carina: no exagero (ríe)
Doctor: jajaja bueno esa
es la condición, si no la cumplís ya sabés lo que pasa…(dijo advirtiéndole) te
volvemos a internar
Carina: no no por favor
Sebastian: igual no se
preocupe doctor que entre todos la vamos a cuidar muy bien y vamos a hacer que
cumpla con todo lo que usted ordene (predispuesto)
Doctor: bueno me parece
muy bien, me retiro entonces…podés comenzar a vestirte ahora y prepararte para
irte Carina, solo tienen que firmar unos papeles en recepción y pueden irse
(sonriendo)
Carina: gracias doctor
(sonríe)
Liliana: si doctor gracias
por todo
Doctor: no hay de que por
favor, es mi trabajo y lo hice con gusto (sonríe)
Sebastian: de todas
maneras se agradece
Doctor: bueno de nada
(sonríe) los dejo…espero que te vaya muy bien Cari, y que sigas grabando Dulce
Amor que me encanta, con mi mujer lo vemos todos los días (sonriendo)
Carina: ah si? jajaja
bueno gracias, me alegro que le guste, y siga viéndolo (le hace una guiñada)
Doctor: por supuesto (le
sonríe) bueno hasta luego, fue un gusto (se retira)
Liliana: chau hasta luego
doctor
Sebastian: chau gracias
El médico se va y Carina
comienza a vestirse casi desesperadamente, ya que tenia tantas ganas de volver
a su casa que quería irse lo mas rápido posible.
Una vez que se terminó de
preparar fueron a firmar los papeles a recepción y luego se fueron hacia la casa
de Carina.
Sebastian: amor yo tengo
que ir a buscar a mis hijos a lo de Sol, que me dijo Ivanna que los había
dejado con ella, no te enojas no?
Carina: no amor como me
voy a enojar? andá tranquilo (sonríe)
Sebastian: dale, enseguida
vengo con ellos…
Carina: dale dale, me
encanta…tengo unas ganas de verlos (dice tiernamente) además dentro de un rato
me traen a Manu asi que genial
Sebastian: ah buenísimo, y
podemos cenar todos juntos si te parece
Carina: por supuesto! Me
encanta la idea (contenta)
Sebastian: bueno ya vengo
entonces, te amo (dice dándole un beso)
Carina: yo tambien
Sebastian se va y al rato
suena el timbre de su casa, era Pablo que venía con Manuel, él tenía muchas
ganas de verla y la había extrañado mucho.
Carina: mi amorrr! (dijo
felíz)
Manuel: maaa! (abrazándola
muy fuerte)
Carina: como estas mi
amor, la pasaste bien?
Manuel: si ma pero decime
como estas vos! ya estás mejor? No pasó nada grave? Decime la verdad ma
(preocupado)
Carina: no amor tranquilo
que estoy bien, no me pasó nada, asi que no te preocupes si? (dijo tomándolo de
la cara y dándole un beso en la frente)
Manuel: me lo juras? (aun
no muy convencido)
Carina: te lo juro amor
enserio, estoy bien (sonríe)
Manuel: bueno me quedo
tranquilo entonces, te extrañé mucho ma (abrazándola)
Carina: y yo? Ufff no
sabés cuanto (abrazándolo mas fuerte)
Manuel: pero por qué no me
dejaron ir a verte al hospital? Yo quería estar con vos ma
Carina: porque no hijo,
para qué ibas a ir a ese lugar tan feo? No no, si yo estaba bien (le da un beso)
Manuel: esta bien, si vos
lo decís…(sonríe y le da un beso muy fuerte en la mejilla)
A todo esto Pablo
observaba con mucha dulzura aquella escena entre su hijo y Carina, y cada vez
se daba mas cuenta de por qué se había enamorado de ella y por qué aun la
seguía amando con locura.
Pablo: eh…Cari puedo
hablar con vos?
Carina: eh…si por supuesto
(no sabía de que quería hablar con ella)
Liliana: Manu vamos un
ratito a tu habitación? Y me contás que hiciste con tu papa dale? (tratando de
dejarlos solos para que pudieran hablar tranquilos)
Manuel: bueno vamos (sabía
que querían hablar solos asi que fue con su abuela)
Carina: bueno…estamos
solos, de que querías hablar conmigo? (preguntó curiosa)
Pablo: eh…en realidad
quería hablar…de nosotros (algo nervioso)
Carina: de nosotros? (no
entendía)
Pablo: si, yo…vine a
despedirme (triste)
Carina: a despedirte? Por
qué, te vas de viaje?
Pablo: no, vine a
despedirme de vos…y del amor que te tengo (con los ojos cristalinos)
Carina: (en ese momento
Carina pudo entender a lo que Pablo se refería, y no sabía que decirle) Pablo
yo…perdoname, no se que decirte, solo que…lamento que todo haya terminado asi,
y si te lastimé de algún modo tambien te pido perdón (triste)
Pablo: no Cari vos no
tenés que pedirme perdón por nada, el imbécil fui yo…que no supe valorarte ni a
vos ni al amor tan sincero que me tenías, y me arrepiento tanto, pero
tanto…igual se que ya no hay vuelta atrás, y…me costó…me costó bastante pero
entendí que vos sos felíz con Sebastian y que…tengo que dejarte ir (tratando de
no llorar)
Carina: Pablo…(solo quería
consolarlo, se sentía mal por él)
Pablo: shh no digas nada
(dijo impidiéndole hablar colocando el dedo índice en sus labios) solo quiero
pedirte una cosa…que espero puedas concederme (mirándola a los ojos)
Carina: decime…lo que sea
(mirándolo)
Pablo: un beso de
despedida, el último…una última vez que pueda probar tus labios, por
favor…(casi suplicándoselo)
Carina: (vió la enorme
tristeza en sus ojos y no pudo negarse, sentía demasiada tristeza por él, y si
un beso lo haría sentirse mejor entonces estaba dispuesta a hacerlo)
Pablo: (se dió cuenta que
Carina iba a regalarle ese último beso, asi que se acercó a ella, la tomó de su
rostro con delicadeza y contempló sus labios unos segundos…hasta fundirse en
ellos completamente…)
CONTINUARA…
Juro Que llore,quiero el 50
ResponderEliminarSiempre tan Genia!